EMOCIONES EN EL EMBARAZO

El estado emocional de la mujer a lo largo del embarazo afecta a largo plazo a la salud mental del bebé.

• Al parecer, emociones negativas continuadas, como el estrés, producen la segregación de hormonas tóxicas, como el cortisol, capaces de atravesar la placenta, llegar al feto y afectar al desarrollo de su sistema nervioso.
  

•  La placenta funciona como una especie de envoltura protectora. Pero estados de emociones negativas continuados pueden afectar su función, sobre todo el estrés.

•  La placenta actúa como filtro e impide que el cortisol, que es tóxico, llegue al feto. Cuando los niveles de esta hormona en la madre son muy elevados, atraviesan esta barrera y disparan la respuesta de alerta en el feto.El bebé recibe el mensaje de que deberá hacer frente a un entorno peligroso al nacer. Eso lo hace mucho más pronto a reaccionar: suelen ser niños más susceptibles a llorar, a estresarse, a sentir ansiedad.

•  Además, existen indicios de que niveles altos de cortisol elevan el riesgo de que el niño padezca síndrome de déficit de atención o hiperactividad.

•  La ansiedad de la madre hace que se reduzca el flujo sanguíneo que le llega al feto, por lo que éste dispone de menos nutrientes para formarse.

• Cuanto más alto es el nivel de cortisol en el líquido amniótico que rodea al niño en la placenta, más bajo es luego el coeficiente intelectual del bebé.

Todo esto lejos de asustarnos debe favorecer el autocuidado de la mujer embarazada. Programar un tiempo de dedicación para la relajación o Mindfullnes será muy beneficioso para el manejo de las emociones.

Consulta un ejercicio practico para trabajar las emociones en el embarazo en la sección "practica contigo".

Extraido de la revista QUO, escrito por Cristina Saez.